Viajes astrales.

Yo nos soy el cuerpo...

Todas las noches y para que el cuerpo pueda recargarse, salimos en astral inconscientemente.

Lo natural debería ser que nos desprendiéramos de nuestro cuerpo físico conscientemente.
Debido al estado de sueño de la consciencia, no percibimos tal evento diario.
Es importante comprender que es un evento completamente natural y diario.

El mundo tridimensional y el mundo tetradimensional son los asientos del cuerpo físico.
El mundo de las emociones, la quinta coordenada o mundo astral, es el asiento del cuerpo astral.
Dicha dimensión está regida por un menor número de leyes. En ella no exista la gravedad ni tampoco la cohesión molecular.
En otras palabras se flota y se cambia de forma a voluntad.
Una ley importante que gobierna la pentadimensión es la atracción universal.
Es decir se atrae lo que se parece a uno.

Salir conscientemente al astral no requiere de pócimas y bebidas milagrosas.
Salir conscientemente al astral no requiere de maestros guías.
Salir conscientemente al astral no es únicamente de seres espirituales y nirvánicos.
Salir conscientemente al astral debería ser natural y adecuado.

Existen muchos y variados métodos.
Personalmente me ha servido el siguiente ejercicio, muy sencillo por cierto:

• Nos acostamos cómodamente sobre nuestro lado derecho, recogidas parcialmente las rodillas y nuetra cabeza apoyada sobre las manos juntas. 
• Vocalizamos mentalmente la vocal "i".
• Relajados sentimos que el sueño nos vence.
• A nivel interior estamos pendientes del instante entre la vigilia y el sueño.
• En un momento preciso sentimos que flotamos.
• Muy bien... ¡levántese!
• Usted va ha mirar su cuerpo relajadamente dormido.
• ¡Ya lo ha hecho!

Lo interesante, lo importante de esta práctica es comprobar que Usted no es el Cuerpo.
¡Diviértase!
Visite templos místicos, lugares mágicos.
¡Es bellísimo!

Requisitios:

• Es necesario tener en cuenta durante el tiempo en que quiera hacer la práctica, el "desayunar como rey, almorzar como príncipe y merendar como mendigo".
• Estar en constante eliminación de defectos.

Atentamente
Erick Bojorque

Este extracto es producto de la sabiduría del Venerable Maestro Samel Aun Weor.