martes, 25 de julio de 2017
miércoles, 21 de junio de 2017
jueves, 27 de abril de 2017
Superar la Tristeza.
LA TRISTEZA
Es un defecto psicológico que causa estragos cuando se manifiesta frente a eventos extraordinarios de vida o de manera crónica. Indispensable para superarlo es su eliminación mediante la comprensión y la ayuda de nuestra Madre Divina Kundalini. Pero, para ayudarnos en caso de desconocimiento de los procesos de autorrealización podemos emplear tres acciones:
1.-Comer media pitahaya diaria hasta sentirnos mejor.
2.-Ejecutar baños con agua de rosas diario hasta sentirnos mejor.
3.-Tomar la postura indicada en la fotografía que permite estructurar el cuerpo emocional, deteniendo su acción inestable y permitiéndonos superar el trastorno de manera inmediata. Sentirá calor. La postura será durante tres minutos.
Erick Bojorque Pazmiño.
En la imagen Johanna Jara
jueves, 13 de abril de 2017
martes, 21 de marzo de 2017
SANACIÓN ENERGÉTICA GNÓSTICA
PRINCIPIOS
IMAGOTIPO DE LA SANACIÓN
La Sanación Energética Gnóstica es una fusión de Sanación Pránica de Grand Master Choa Kok Sui con la sabiduría Gnóstica del Venerable Maestro Samael Aun Weor que la he realizado durante una práctica a la fecha de 8 años en los que se han atendido diferentes pacientes con resultados magníficos. Con Sanación Pránica se ejecuta la medida energética de las auras internas de los pacientes para limpiar, energizar y estabilizar sus distintos chakras que para ésta sanación son 11 de cuya actividad depende la sanidad de las personas. Sanación Pránica maneja energías a nivel vital que se corresponden con la cuarta coordenada, dimensión o hiperespacio incluyendo también las manifestaciones etéricas de las relaciones personales en cuerpos etéricos. Con sanación pránica el sanador puede alcanzar maravillosas sanaciones ya que permiten que los chakras que son en un símil como los sensores de un sistema electrónico de los automóviles, funciones adecuadamente enviando y retransmitiendo las energías pránicas o crísticas o chi de la naturaleza al organismo. Pero durante mis investigaciones pránicas comprendí que los pacientes tendían a regresar a la consulta debido a que existía en ellos contaminación propia causada por lo que en Gnosis se conocen como yoes psicológicos, lo que evitaba su completa sanación. Por eso me fue dado el acierto de combinar el portal del conocimiento energético Pránico con la sabiduría de la Gnosis que realmente vino a dar luces magníficas a las sanaciones abriendo infinitas posibilidades de acción de entre las cuáles hemos desarrollado tres principios. Claro que salta explicar que el cuerpo físico no es solamente una entidad tridimensional sino que es todo un componente de elementos energéticos poco estudiado y menos desarrollado. Tengamos presente que han pasado cerca de mil años desde que el primer alquimista tuvo la audacia de cortar la epidermis humana para adentrarse en aquello que hoy podemos ver dibujado en todo su esplendor en una lámina de anatomía. Mil años. Imaginemos en tal virtud lo que le tomará al ser humano saber y comprender acerca de los cuerpos energéticos. Lo único que diferencia a una persona muerta de una persona viva es su energía, la energía termo electro magnética en lo más cercano y a nivel pránico pero también la energía psíquica en lo dimensional. La Sanación Energética Gnóstica nos habla de esto último y descubre infinitas posibilidades de sanidad de entre las cuales podemos decir que solamente en el conteo de chakras acontece que en el ser humano existen 123 de estos vórtices.
PRIMER PRINCIPIO
"Todo es un eterno presente"
El Maestro Samael aun Weor dice que "todo es un eterno presente" y que si un maestro despierto pudiera ver a una persona ahí en ese instante también podría ver a esa persona gestándose, naciendo, siendo infante, adolescente, adulto, en la vejez y muriendo en ese mismo instante aquí y ahora. Claramente esto escapa a las teorías educativas que sorprenden a la humanidad proponiendo que el tiempo es lineal y que existe un pasado un presente y un futuro o a aquellas teorías cuánticas que establecen que los sucesos dependen del observador. Entonces aquí viene el aporte. Si el sanador puede ejercer sanidad en la persona presente también y de la misma manera puede sanar a la persona cuanto se encontraba en la infancia temprana, pues ese instante también está presente. Esto es magnífico pues muchos de los padecimientos contemporáneos son producidos en el enfermo por situaciones vividas en su niñez. Lo mismo en la adolescencia o hace algunos meses o años. La sanidad de enfermos ha venido a demostrar tal realidad dicha por el Maestro Samael Aun Weor.
SEGUNDO PRINCIPIO
"Los estados anímicos son cuerpos"
Estamos acostumbrados a pensar que las emociones, los pensamientos, los quereres, los anhelos y los emprendimientos son simples estados anímicos que se suceden de momento en momento y que nada tienen que ver con la realidad de nuestra manifestación interior sino que más bien son el reflejo de lo que acontece en el exterior. Samael Aun Weor nos dice que esos estados anímicos son "cuerpos" y que por ejemplo una emoción procede de la acción del "cuerpo emocional". Igualmente podemos decir de las ideas como la acción del "cuerpo mental", los quereres como la acción del "cuerpo volitivo" o de las causas. Ya en mis investigaciones he descubierto aparte de lo que dice el Maestro y en su misma disertación que los anhelos son la manifestación de la acción del "cuerpo espiritual" y los emprendimientos como la manifestación del "cuerpo base" o de la vocación. Todos estos cuerpos forman parte de los "cuerpos internos" personales y como dice el Maestro son la viva representación del cuerpo físico, exactamente como reza también el segundo principio hermético "como es arriba es abajo; como es abajo, es arriba" pero que están en estado embrionario amorfo pues los seres humanos no tenemos una realidad estable interiormente. Ahora, aquí el aporte. Si el sanador puede sanar el cuerpo físico y vital de la persona, entonces de la misma manera y con las mismas técnicas puede sanar los "cuerpos internos" del paciente. Esto es magnífico pues se sabe que muchas de las condiciones de enfermedad física proceden de los conocidos bloqueos emocionales, mentales y que son tratados con paliativos como son gemas, piedras, magnetos cuya acción se limita al instante dado y no a las causas mismas de la enfermedad. Es tal la condición de incapacidad que hemos logrado negativamente los seres humanos que basta solo un vistazo a la sociedad para darnos cuenta que muchos no solo se encuentran enfermos sino hasta han muerto en sus cuerpos internos. Un sicario que en una esquina asesina a un ciudadano y se retira a su casa a ver televisión con sus hijos, ha muerto emocionalmente. Un orate que termina sus días en un manicomio tiene muerto su cuerpo mental. Ese adolescente que se cuelga en la viga de su habitación murió no solamente físicamente sino antes mucho antes murió en su cuerpo de la voluntad. Ante esta situación el común denominador de la población no sabe qué hacer y dejan la sanidad al tiempo. Ninguna persona en cordura luego de cortarse en un accidente diría "dejemos que el tiempo cure la herida" pero luego de un divorcio, una quiebra, una terrible decepción, si nos atrevemos a decir aquella sentencia tan terrible dejando los cuerpos internos en situaciones catastróficas de incapacidad. Es por ello que muchas personas que han fracasado por decir así, no pueden superar la situación aunque tengan otras condiciones de vida, por ejemplo un nuevo matrimonio, se dan cuenta y son tan incapaces como el parapléjico en silla de ruedas que quiere acceder a un segundo piso pero no lo puede hacer. la sanidad de los cuerpos internos es la sanidad total de la persona en casos.
TERCER PRINCIPIO
"Los pares opuestos"
Samael Aun Weor también asegura la realidad del cuarto principio hermético de las polaridades que establece que "todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse" y por cuya realidad el cosmos existe y se mantiene. Aquí el aporte. Si esto es así y existe la luz y la oscuridad, la mujer y el varón, lo alto y lo bajo, entonces si existen sanadores que son personas entregadas al beneficio común, existen también y de forma refleja personas dedicadas a causar el daño común. Según este principio no hablamos de condiciones morales de bien o mal, pues eso es un raquitismo intelectual, sino comprendemos que es así y que no podría la luz ser luz si su resplandor no existe ya que existe la oscuridad. Dónde estaría el brillo si no estuviera lo opaco. La única diferencia entre quién sana y quién hace daño como dice el Maestro Samael Aun Weor está en el "respeto por el libre albedrío" por lo que un sanador siempre ha de "pedir permiso para sanar a su paciente" caso contrario aunque intentara sanar haría algo impropio, inadecuado, dañino y penado por la Ley Divina. Una madre llorado a Dios podría hacer daño si su oración va encaminada a "cambiar" a su hijo a pesar de su voluntad. Por nuestra parte hemos descubierto dos tipos de injerencias externas en los enfermos que son las distorsiones energéticas y los bloqueos energéticos. El primero de ellos convierte la propia energía de la víctima en destructiva. El segundo bloquea pero no pierde la energía. Cuando una persona por karma ha caído en esta situación su sanidad se vuelve lenta y compleja pues existen agentes de daño actuando en él pero nada es imposible para la voluntad de la Ley Divina y la acción de El Cristo.
Entendiendo esto así, el sanador experto procede a la sanación del enfermo liberándolo según la Ley Divina de su dolencia.
SEGUNDO PRINCIPIO
"Los estados anímicos son cuerpos"
Estamos acostumbrados a pensar que las emociones, los pensamientos, los quereres, los anhelos y los emprendimientos son simples estados anímicos que se suceden de momento en momento y que nada tienen que ver con la realidad de nuestra manifestación interior sino que más bien son el reflejo de lo que acontece en el exterior. Samael Aun Weor nos dice que esos estados anímicos son "cuerpos" y que por ejemplo una emoción procede de la acción del "cuerpo emocional". Igualmente podemos decir de las ideas como la acción del "cuerpo mental", los quereres como la acción del "cuerpo volitivo" o de las causas. Ya en mis investigaciones he descubierto aparte de lo que dice el Maestro y en su misma disertación que los anhelos son la manifestación de la acción del "cuerpo espiritual" y los emprendimientos como la manifestación del "cuerpo base" o de la vocación. Todos estos cuerpos forman parte de los "cuerpos internos" personales y como dice el Maestro son la viva representación del cuerpo físico, exactamente como reza también el segundo principio hermético "como es arriba es abajo; como es abajo, es arriba" pero que están en estado embrionario amorfo pues los seres humanos no tenemos una realidad estable interiormente. Ahora, aquí el aporte. Si el sanador puede sanar el cuerpo físico y vital de la persona, entonces de la misma manera y con las mismas técnicas puede sanar los "cuerpos internos" del paciente. Esto es magnífico pues se sabe que muchas de las condiciones de enfermedad física proceden de los conocidos bloqueos emocionales, mentales y que son tratados con paliativos como son gemas, piedras, magnetos cuya acción se limita al instante dado y no a las causas mismas de la enfermedad. Es tal la condición de incapacidad que hemos logrado negativamente los seres humanos que basta solo un vistazo a la sociedad para darnos cuenta que muchos no solo se encuentran enfermos sino hasta han muerto en sus cuerpos internos. Un sicario que en una esquina asesina a un ciudadano y se retira a su casa a ver televisión con sus hijos, ha muerto emocionalmente. Un orate que termina sus días en un manicomio tiene muerto su cuerpo mental. Ese adolescente que se cuelga en la viga de su habitación murió no solamente físicamente sino antes mucho antes murió en su cuerpo de la voluntad. Ante esta situación el común denominador de la población no sabe qué hacer y dejan la sanidad al tiempo. Ninguna persona en cordura luego de cortarse en un accidente diría "dejemos que el tiempo cure la herida" pero luego de un divorcio, una quiebra, una terrible decepción, si nos atrevemos a decir aquella sentencia tan terrible dejando los cuerpos internos en situaciones catastróficas de incapacidad. Es por ello que muchas personas que han fracasado por decir así, no pueden superar la situación aunque tengan otras condiciones de vida, por ejemplo un nuevo matrimonio, se dan cuenta y son tan incapaces como el parapléjico en silla de ruedas que quiere acceder a un segundo piso pero no lo puede hacer. la sanidad de los cuerpos internos es la sanidad total de la persona en casos.
TERCER PRINCIPIO
"Los pares opuestos"
Samael Aun Weor también asegura la realidad del cuarto principio hermético de las polaridades que establece que "todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades, todas las paradojas pueden reconciliarse" y por cuya realidad el cosmos existe y se mantiene. Aquí el aporte. Si esto es así y existe la luz y la oscuridad, la mujer y el varón, lo alto y lo bajo, entonces si existen sanadores que son personas entregadas al beneficio común, existen también y de forma refleja personas dedicadas a causar el daño común. Según este principio no hablamos de condiciones morales de bien o mal, pues eso es un raquitismo intelectual, sino comprendemos que es así y que no podría la luz ser luz si su resplandor no existe ya que existe la oscuridad. Dónde estaría el brillo si no estuviera lo opaco. La única diferencia entre quién sana y quién hace daño como dice el Maestro Samael Aun Weor está en el "respeto por el libre albedrío" por lo que un sanador siempre ha de "pedir permiso para sanar a su paciente" caso contrario aunque intentara sanar haría algo impropio, inadecuado, dañino y penado por la Ley Divina. Una madre llorado a Dios podría hacer daño si su oración va encaminada a "cambiar" a su hijo a pesar de su voluntad. Por nuestra parte hemos descubierto dos tipos de injerencias externas en los enfermos que son las distorsiones energéticas y los bloqueos energéticos. El primero de ellos convierte la propia energía de la víctima en destructiva. El segundo bloquea pero no pierde la energía. Cuando una persona por karma ha caído en esta situación su sanidad se vuelve lenta y compleja pues existen agentes de daño actuando en él pero nada es imposible para la voluntad de la Ley Divina y la acción de El Cristo.
Entendiendo esto así, el sanador experto procede a la sanación del enfermo liberándolo según la Ley Divina de su dolencia.
Atentamente
Erick Bojorque Pazmiño
miércoles, 15 de marzo de 2017
SOLTAR...
El efecto de soltar tiene como causa la consciencia de permitir el flujo normal y adecuado de todos los tipos de energía. Cuando se retiene, cuando se represa existe la necesidad de algo que sostenga aquello represado lo que necesariamente implica una congestión energética. El acto de soltar tiene como efecto la descongestión y por tanto la sanidad. El acto de retener implica también control y el control requiere de una inteligencia y de recursos que en ello se desgastan. Para retener haz de ser muy fuerte ya que es algo anormal ya que en la naturaleza todo fluye y en caso de retención se espera como par opuesto la destrucción. Los ciclos naturales nunca se detienen y como nosotros somos parte de la naturaleza el detener nos convierte en agentes destructivos de nosotros mismos y/o del entorno. En el soltar está la sanidad. Respirar y soltar es algo natural.
Atentamente
Erick Bojorque Pazmiño
lunes, 13 de febrero de 2017
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