Saludos cordiales
Cuando somos capaces de comprender algo, nuestro sistema glandular produce endorfinas que afectan positivamente nuestro estado de ánimo. (1)
Según los neurocientíficos estamos hechos para aprender, para conocer, para resolver problemas.
Cuando lo hacemos estallamos de júbilo, nos sentimos contentos, apreciamos lo que somos.
Muy al contrario, en la ignorancia, en la necedad, en la falta de soluciones, encontramos la depresión, la frustración, estados de rechazo y auto desprecio.
Partiendo de aquello diríamos directamente que la auto estima depende de la capacidad para solventar los problemas que se nos presentan.
Una autoestima elevada es el resultado de verse competente ante la vida.
La falta de autoestima es el resultado de esquivar las dificultades.
La buena autoestima es la capacidad de "hacer". La capacidad de hacer es la suma de ser y saber.
La baja autoestima es "dejarse llevar" por la vida.
La autoestima erróneamente entendida es el orgullo, narcisismo, vanagloria, soberbia, superioridad,etc.
Los patrones generacionales de baja autoestima deben romperse.
Enseñar a la prole a resolver problemas les conduce a una vida equilibrada.
La mejor manera de elevar la autoestima de un niño, un joven o un adulto, no es tanto halagarlo como permitirle las facilidades como para que enfrente y resuelva problemas.
Atentamente
Erick Bojorque
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